La artista argentina Paula Moscuzza, con la colaboración de vecinas de la ciudad y el Rincón Lento, inaugura este martes 21 de septiembre a las 19h una muestra de arte en la calle que surgió durante el confinamiento.
Las personas que paseen del 21 de septiembre al 21 de noviembre por la cuesta Calderón con Benito Hernando podrán descubrir una veintena de reproducciones de los cuadros que Paula ha venido pintando en los últimos años, previos a la pandemia y durante la misma. La historia de esta particular exposición se remonta inevitablemente al confinamiento: a partir de los lazos creados durante la pandemia, las vecinas le ofrecieron sus balcones para exponer, en una primera exposición en pleno Lavapiés. La relación con ellas se vio fortalecida en los momentos de cuarentena durante 2020. Con algunas, incluso, no se conocía antes de ella. “Salir a la hora de los aplausos, ver que encontraba saludos del otro lado de la calle o en los balcones cercanos, fue generando una red afectiva que tienen tanta importancia como la muestra misma”, confiesa Moscuzza.
El espíritu colaborativo ha acompañado todo el desarrollo de este proyecto artístico al que El Rincón Lento tenía echado el ojo desde que se colgaron las primeras lonas en Madrid. Fue entonces cuando utilizando las redes sociales, se puso a buscar “comunidad de vecinos maja que quiera hacer de su edificio es más molón de Guadalajara”. No les faltaron candidatas, y finalmente, uno de los edificios de la Cuesta Calderón fue el elegido, por la singularidad de sus 22 balcones. Incluso el Ayuntamiento se ha interesado en la obra de la artista. “Sería fantástico que la exposición de Paula sea nómada y viaje a muchos lugares distintos, generando una nueva forma de ver arte en la calle”, comentan desde la asociación.
La muestra es una selección de tres colecciones de Moscuzza, pintadas en diferentes momentos vitales. Una de ellas, denominada Rituales, habla sobre los pequeños rituales cotidianos que tenemos. La serie Persona son retratos mediante los cuales la artista busca romper con los binarismos de género. La última tienen que ver con el mar. Obras llenas de color y que no dejan indiferente a nadie.
Paula lleva 17 años residiendo en Madrid, pero entre medias, vivió una temporada en Guadalajara, donde hizo buenas migas con la gente del Rincón Lento. Allí pintaba muchas tardes, y se hizo un hueco en la ciudad. Ahora, regresa con su obra al aire libre, gratuita y accesible para todo el mundo, y lo hará seguro acompañada de muchas personas que la aprecian.