El Teatro Auditorio Buero Vallejo ha acogido esta tarde el homenaje póstumo al recientemente fallecido actor y director Fernando Romo.
Con la presencia de sus familiares, el mundo de la cultura y el teatro de Guadalajara, el acto ha consistido en un emotivo y cuidado repaso a la vida, y a la trayectoria profesional de Romo, desde sus inicios en el grupo Antorcha, pasando por sus dos etapas al frente de la compañía Fuegos Fatuos; el Tenorio Mendocino y su etapa en Madrid.
El alcalde de Guadalajara, Alberto Rojo, que ha asistido a este emotivo reconocimiento, junto a miembros de la Corporación municipal y otras autoridades de la provincia, expresaba: “hoy nos une la admiración y el reconocimiento a un hombre de teatro, polifacético; vanguardista, una figura clave en el mundo escénico de nuestra ciudad. No se puede entender el teatro de Guadalajara sin la figura de Fernando Romo, sin su visión innovadora y creativa”.
Para el alcalde de la ciudad, “Fernando Romo era un hombre adelantado a su tiempo, un hombre generoso y valiente. Decía que una sociedad sin cultura es una sociedad muerta y sin color, y no puedo estar más de acuerdo”, ha dicho el primer edil.
En el escenario del Teatro Auditorio Buero Vallejo, cinco mesas rodeadas de sus amigas y amigos, compañeros de profesión, representando cada una de las cinco etapas en las que se ha dividido el homenaje.
Actuaciones musicales; escenas de algunas de las obras de sus dos etapas en Fuegos Fatuos y las cariñosas palabras de José Antonio Suárez de Puga han protagonizado los momentos más emotivos. De fondo, un audiovisual recordaba su faceta personal, sus primeras actuaciones en Antorcha; la fundación de Fuegos Fatuos, la primera compañía profesional de Castilla-La Mancha, con imágenes de sus ensayos, representaciones, premios, junto a Estrella Ortiz y algunos de sus mejores amigos y fundadores de la compañía.
La segunda etapa de Fuegos Fatuos, la más ecléctica, la comparte con César Maroto; Ana Vélez: Juan Morillo, y Luis Miguel Toribio, entre otros. La compañía representa Tartufo y Las mujeres sabias, de Moliere, en el prestigioso Festival de Teatro Clásico de Almagro. En 2005 Fernando Romo recibe el ‘Maximino de Honor’, en la gala de los Premios Max celebrada en Guadalajara, por Fuegos Fatuos a su labor teatral.
También como director fue nominado en los premios Max 2009 al Mejor Espectáculo Revelación por Las mujeres sabias de Molière. Con ella produjo y actuó en espectáculos de todo tipo.
Profesionalizó el Tenorio Mendocino. En 2004 crea el FUT y en 2007 se puso al frente de la Escuela Municipal de Teatro, y de la dirección del Festival Ducal de Pastrana.
Su última etapa profesional la desarrolló en Madrid, donde también fue reconocido como un gran actor-
El acto ha sido impulsado por el Ayuntamiento de Guadalajara, con la organización de amigas, amigos y compañeros de profesión.