Cuando una obra pública falla desde el primer día, lo razonable es que la administraciónresponsable actúe con diligencia. Pero en el caso del paso inferior de ADIF en Yunquera deHenares, llevamos desde 2011 soportando una dejadez que roza lo intolerable. Y lo que comenzó como una disfunción técnica ha devenido en una amenaza real para nuestros vecinos, nuestras infraestructuras y nuestro entorno.

Desde el Ayuntamiento hemos hecho lo que tocaba: inspecciones técnicas, informes,comunicaciones, seguimiento constante, propuestas de solución y cooperacióninstitucional. Como senador, llevé este asunto al Senado en varias ocasiones para que el Gobierno pusiera plazos, asumiera responsabilidades y garantizara una intervención a la altura del problema.
La obstrucción de la tubería, el bombeo constante, el descalce del vallado, el riesgo deasiento bajo la vía férrea y la sobrecarga en nuestra depuradora no son opiniones: son hechos documentados. También lo es que la Confederación Hidrográfica del Tajo dio suvisto bueno hace ya casi un año para que ADIF realizara la obra necesaria.
Entonces, ¿qué falta? Falta voluntad. Falta responsabilidad. Y falta respeto institucional hacia un municipio que, desde hace más de una década, espera una solución a un problema que no ha generado, pero sí sufre.
No pedimos favores. Exigimos soluciones. Por eso, hace una semana, volvimos a dirigimos a ADIF para requerir, con firmeza y argumentos, que comiencen ya las obras, que den la cara,que informen con claridad y que asuman su obligación.
Porque gobernar no es mirar para otro lado. Gobernar es defender los intereses de tu gente,incluso cuando no es fácil. Eso es lo que hacemos en Yunquera de Henares. Eso es lo queseguiré haciendo.
Por Lucas Castillo Rodríguez, alcalde de Yunquera de Henares