En el capítulo primero de La República dice Aristóteles: Aquellos, pues, que opinan que todos los hombres son aptos para regir una ciudad o un reino, lo mismo que para una familia, no lo entienden bien.
Efectivamente, no todos son capaces ni están capacitados, pero sí lo es y lo está Alberto Rojo Blas. Tiene talante y talento.
Su carácter, personalidad y excelente disposición es lo que nos ha conducido a sumarnos a este proyecto de cambio e impulso necesario para Guadalajara.
Lo hacemos de manera independiente, pero no con menor compromiso que el resto de quienes componemos la candidatura del PSOE al Ayuntamiento de Guadalajara en las próximas elecciones municipales.
Si hay una persona preparada para abanderar este cambio es, sin duda, Alberto Rojo. Un político dialogante, cercano, trabajador, honesto y buena gente, como la buena gente de Machado. Cualidades imprescindibles para ser alcalde, para ser un buen alcalde, y que en Alberto Rojo son innatas. Su compromiso con la ciudadanía de Guadalajara es sincero, transparente, con unos objetivos claros y que consisten en escuchar, proponer y cumplir.
Alberto Rojo genera confianza y mucha ilusión, dos ingredientes absolutamente imprescindibles para liderar este viaje hacia la Guadalajara que queremos.
VANGUARDIA
Encabeza un movimiento tranquilo para sacar a Guadalajara del letargo en el que vive desde hace años, que sitúe a nuestra ciudad a la vanguardia en políticas sociales; de igualdad; que impulse el tejido empresarial; respetuoso con el medio ambiente; feminista, y que apueste por la cultura y el deporte haciendo especial hincapié en las escuelas y en el deporte nacido en Guadalajara por y para la ciudadanía como poderosas herramientas para la transformación de nuestra sociedad.
Alberto Rojo tiene una actitud absolutamente constructiva, como él mismo pone de relieve cuando manifiesta expresamente que su candidatura “no va contra nadie”. Eso significa que reconoce las tareas previas de los sucesivos equipos de gobierno, y que no es el descubridor de un Mediterráneo ya descubierto.
Su interés estriba en ofrecer soluciones distintas con el único fin de mejorar nuestra ciudad, aquejada de graves problemas de movilidad urbana, de una flagrante desigualdad poblacional y dotacional en sus barrios y necesitada de una buena dosis de autoestima.
En definitiva, quiere acudir con nuevas ideas que permitan estudiar y llevar a la práctica posibles soluciones allí donde las que hay no han resuelto problemas ya endémicos, y otro tanto para los derivados de los cambios de paradigma que suponen los desafíos medioambientales y los condicionamientos que los avances de la sociedad imponen.
Esto sin olvidar la acogida que una ciudad como la nuestra tiene que dar a quienes la visiten, lo que supone también una nueva manera de tratar el patrimonio histórico, especialmente el casco antiguo, pero también de revalorizar el entorno inmediato, hoy ahogado por polígonos y carreteras, y no tan inmediato, ya que su término tiene 270 km2, pero de indudable importancia para la calidad de vida de todos, porque Alberto está convencido de que Guadalajara tiene que ser una ciudad más cómoda, limpia, culta y respetuosa con su entorno.
COMPROMISO
Alberto Rojo quiere que en su equipo desempeñen un papel de peso personas que, como nosotros, estamos alejados del activismo político militante, pero que formamos parte muy activa de la vida de nuestra ciudad.
Por eso nos propone aportar nuestro granito de arena desde nuestras respectivas y dispares ocupaciones, y lo hace con un entusiasmo contagioso que augura una efectiva dedicación plena a la tarea y que dificulta enormemente decirle que no. Por eso estamos.
Hoy, a la ciudad le falta pulso e impulso. Y ese es nuestro compromiso con Alberto Rojo, empujar para que se produzca el movimiento necesario que revitalice Guadalajara.
Evaristo Olcina, Paloma Mora, Juan Leal y Andrés Herranz, candidatos independientes por el PSOE al Ayuntamiento de Guadalajara