Este mes de febrero, el detalle monumental destacado del programa ‘Guadalajara Abierta’ son las representaciones de las virtudes teologales y cardinales, las sibilas y los profetas de la capilla de Luis de Lucena.
Este clérigo y médico natural de Guadalajara, que pasó gran parte de su vida en Roma, se hizo construir antes de su marcha una capilla adosada a la iglesia de San Miguel, entre los años 1538 y 1540.
Encomendó la decoración a dos artistas italianos, Pietro Morone y Pietro Paolo de Montalbergo, con clara inspiración en la obra de Miguel Ángel de la Capilla Sixtina.
Así, desarrollaron un programa iconográfico en el que, además de escenas del Antiguo Testamento, representan las virtudes cardinales y teologales, sibilas y profetas, figuras que este mes constituyen este detalle monumental.
La capilla de Luis de Lucena se encuentra cerrada al público en estos momentos debido a las medidas de nivel 3 reforzadas frente al coronavirus decretadas por Sanidad en la ciudad; por tanto, el detalle podrá disfrutarse una vez el monumento recupere su horario habitual.