La Diputación de Guadalajara ha aprobado una moción que fija el posicionamiento con que esa institución participará en la consulta pública abierta por el Gobierno de España para modificar las reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura.
Para debatir y votar esta moción, presentada por el Grupo Socialista, a tiempo de presentar sus alegaciones a la consulta pública del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, la Diputación ha convocado un pleno extraordinario.
La moción aprobada, que va acompañada de un anexo en el que figuran las propuestas concretas que se trasladarán al Gobierno de España, como elevar los niveles de reservas no trasvasables, dar prioridad a la cuenca cedente, garantizar el abastecimiento de los municipios ribereños, garantizar los caudales ecológicos del Tajo y apostar por la desalación como alternativa al trasvase, no ha sido apoyada por los grupos políticos de PP y Vox.
El resultado de la votación ha sido de 13 votos a favor, de los diputados y diputadas socialistas, 9 abstenciones del Grupo Popular y 2 votos en contra de Vox.
Unidad de la sociedad provincial en defensa de nuestros intereses hídricos.
La moción aprobada establece en primer lugar que la Diputación de Guadalajara defiende la unidad de la sociedad provincial y regional -instituciones, sociedad civil y ciudadanía- en la defensa de los intereses hídricos de Castilla-La Mancha y del río Tajo.
Y, en base a dicha unidad, insta al equipo de Gobierno de la Diputación a participar en la consulta pública previa a la aprobación del Real Decreto por el que van a aprobarse nuevas normas reguladoras del trasvase Tajo-Segura.
El diputado que ha defendido la moción del Grupo Socialista, Francisco Pérez Torrecilla, ha ofrecido en defensa de dicha posición de unidad incluir parte de una enmienda del Grupo Popular que hacía referencia al Pacto Regional del Agua en este primer punto, algo que no se ha aceptado por los diputados del PP y finalmente se ha votado el texto original de la moción del Grupo Socialista.
Sobre el resto de enmiendas, Pérez Torrecilla ha explicado que no se admitían porque, o bien estaban ya recogidas en la moción presentada por el Grupo Socialista a lo largo de varios puntos, o bien eran completamente ajenas al debate para presentar propuestas a la consulta pública del Ministerio, ya que planteaban acciones que no se pueden llevar a cabo en el plazo establecido.
Elevación del umbral de reserva no trasvasable.
Una vez aprobada esta moción por el pleno de la Diputación, el posicionamiento a defender por su equipo de Gobierno en la consulta pública del Gobierno de España propone elevar los niveles de almacenamiento de los embalses de Entrepeñas y Buendía por encima de los 400 hectómetros cúbicos de agua actuales, cifra que se ha demostrado “muy insuficiente para mantener una lámina adecuada y estable” en los pantanos de la cabecera del Tajo.
De esta forma, se propondrá recuperar el modelo de gestión hiperanual, sustituyendo la carrera de explotación que da como resultado dejar a los embalses con entre un 15 y un 30% de su capacidad, por otra más garantista que permita contar de manera estable con un volumen de agua almacenada situada entre el 40 y el 60% de la capacidad de los pantanos.
Igualmente, la Diputación defiende reducir los volúmenes trasvasables en los niveles 1, 2 y 3 de reservas embalsadas en Entrepeñas y Buendía y potenciar soluciones de autosuficiencia en la cuenca del río Segura, apostando por la desalación como solución alternativa para cubrir las demandas actuales del trasvase Tajo-Segura.
Así, se pedirá que en el horizonte de 2027 el trasvase Tajo-Segura solo se mantenga abierto para dotaciones de abastecimiento y que el cambio de reglas de explotación garantice la prioridad de la cuenca cedente para satisfacer sus propias necesidades y los caudales ecológicos del Tajo, en cumplimiento de las recomendaciones de la Unión Europea y de cinco sentencias del Tribunal Supremo.