El presidente de Castilla-La Mancha. Emiliano García-Page, se ha mostrado hoy muy molesto por los indultos que hoy concede el Estado a nueve independentistas catalanes.
“Hoy es un día grave para España, de los que pesan y que pueden fijar un antes y un después y yo quiero reivindicar mis valores y aquello por lo que estoy en la vida pública”, ha manifestado el jefe del Ejecutivo regional, que ha reivindicado su posición política en contra de los indultos “por su propia utilidad”.
“Me gustaría equivocarme, estoy deseando equivocarme. Pero la verdad es que no encuentro la fórmula de que se pueda convencer a alguien para que deje de ser lo que es y los independentistas son independentistas, no actúan de independentistas” ha argumentado el mandatario castellanomanchego, que opina que éstos “persiguen fines y objetivos inviables, salvo que se hagan a costa de los derechos del resto de los españoles y, particularmente, de los ciudadanos de Castilla-La Mancha y yo me debo a eso por encima de todo”.
En este orden de cosas, ha garantizado que seguirá luchando contra todo tipo de egoísmo. “Si el egoísmo procede del independentismo que busca amparar privilegios, mal negocio para todos, porque no tiene posibilidad. Me gustaría que el camino que vamos a recorrer no se convierta en un calvario para los españoles. La experiencia me dice otra cosa”, ha lamentado.
En su opinión “solo hay que aceptar las reglas del juego. Yo no puedo pedir a un independentista que deje de serlo, pero discuto sus ideas y lo mismo que un independentista no va a dejar de serlo, yo no voy a dejar de ser un demócrata constitucional que va a defender los derechos de los ciudadanos que me han votado, y los que no, y con ellos defiendo los del conjunto de la sociedad española”, ha rubricado.