Una vez más, una imagen del puente sobre el río Tajo a su paso por Trillo se ha alzado como ganadora del VIII Concurso de Fotografía Objetivo: Trillo y comarca. La instantánea, titulada Reflejos dorados sobre el Tajo y realizada por el fotógrafo aficionado local Javier García Benito, presenta una bella estampa otoñal de esta zona, una de las más emblemáticas del municipio junto a las cascadas del río Cifuentes, con los colores propios de esta época, marrones, dorados y ocres, y con la presencia de niebla sobre las aguas del río, lo que le aporta cierto halo de misterio, de romanticismo y una calidez que han llevado a la instantánea a convertirse en la mejor de esta octava edición del certamen impulsado por el Ayuntamiento de Trillo.
Reflejos dorados sobre el Tajo fue la única imagen presentada por su autor, que, sin embargo, trabajó en varias versiones de la misma toma hasta conseguir la presentada. Además, la galardonada no ha sido tomada este último año, sino el pasado 2023, como reconocía su autor, Javier García Benito, nada más recoger su premio, un cheque de 350 euros para invertir en nuevo material de fotografía en la tienda especializada Fotocasión. Es la primera vez que García Benito se alzaba con el Primer Premio General de este concurso, si bien sí había obtenido otros premios en ediciones anteriores del certamen.
El Premio a la Fotografía Más Original, dotado con 300 euros, fue para Apagón, de la fotógrafa local Beatriz Muñoz Marigil, también veterana en este concurso, en el que ha cosechado diferentes premios. En su caso, la imagen muestra la noche en que todo el pueblo de Trillo se quedó sin suministro eléctrico, cuando se hizo aún más resplandeciente la luminosidad de la central nuclear en medio de un paisaje fundido en negro, en una noche de frío invierno.
Como destacó el jurado del certamen, compuesto por Antonio Damián y Juan Vázquez, miembros de la Agrupación Fotográfica de Guadalajara, y Sergio Recuero, concejal de Festejos y Turismo del Ayuntamiento de Trillo, ambas instantáneas hubieran sido difícilmente capturadas por personas no residentes en Trillo. “En ambos casos, el momento era ese, la hora de la mañana en la que aparece la niebla sobre el agua, las horas en las que todo Trillo buscó velas por casa para poder alumbrarse; son fotografías que difícilmente puede hacer alguien que no esté, que no viva en Trillo, hay que estar ahí en ese momento”, señalaba y destacaba Antonio Damián durante la reunión del jurado, el pasado mes de noviembre.
Lo mismo sucede con los tres premios locales del certamen, que representan momentos muy destacados y concretos de Trillo y sus pedanías. Así, un bello atardecer sobre Morillejo -titulada Atardecer 2– se alzó con el Primer Premio Local en una foto de Eduardo Gordillo Carreiro. Por su parte, Tierno mirar, de Violeta Lobato, consiguió el Segundo Premio Local, mostrando el momento en que un grupo de jóvenes se gira para contemplar a la patrona de Trillo, la Virgen del Campo. Por último, Amanda Fernández Gómez congeló un momento histórico vivido este mismo otoño en Trillo, cuando el río Tajo registro una de las mayores crecidas de su historia, logrando el Tercer Premio Local del certamen con Cuando el río supera el pueblo.
El Premio Especial, este año centrado en la temática Tradición, fue para un fotógrafo que nos tiene acostumbrados a las estampas taurinas, Nacho Morán, que consiguió el galardón con Sabor añejo, una imagen que muestra un festejo taurino en una de las pocas plazas que deben quedar en España que todavía mantiene su antigua configuración, erigida con talanqueras de madera, en una corrida celebrada durante las fiestas de La Puerta, el pasado verano.
Un certamen con una alta participación y éxito local
El concejal Eduardo Cernuda fue el encargado de presentar el acto de entrega de premios el pasado viernes en la Casa de la Cultura, justo después de inaugurar la exposición del certamen, que reúne 50 de las 174 imágenes presentadas, una por cada uno de los participantes, y que se podrá ver durante esta Navidad. El concejal puso de relevancia la calidad de las fotografías recibidas y el alto porcentaje de participantes locales, así como de niños, “señal de que se trata de un certamen con una alta aceptación entre nuestros vecinos”. Junto a ello, también destacó que prácticamente todos los premiados son vecinos y vecinas del pueblo, lo que significa que en Trillo contamos con una gran afición a la fotografía.
Junto a las seis galardonadas, otras ocho fotografías han sido finalistas, por lo que ya ilustran también el Calendario Trillo 2025 junto a las premiadas, un almanaque que cada vecino podrá recoger en el Ayuntamiento de Trillo desde hoy mismo. Concretamente, se trata de: Escaleras al agua, de Francisco Lancho Montaña; La fábrica de nubes, de David Sanz Calvo; Trillo, las Tetas y la central desde el aire, de Sara Pérez Sánchez; Sin título, de Adrián del Sol; Trillo en invierno, de Eduardo Sardat; Camino hacia las estrellas, de Jaume Moreno Roca; Sin título, de Raúl Chacón Carrasco; y El río que casi nos lleva, de Rodrigo Sánchez-Beato Bodega.