El grupo AIKE vuelve a abordar uno de los problemas más acuciantes, el acceso a la vivienda, el partido municipalista propone dar uso a algunos de los numerosos edificios abandonados que hay en la ciudad. La moción ha sido presentada por Susana Martínez, concejala de AIKE en el Ayuntamiento, y Jorge Riendas, portavoz del partido.
El parque de edificios abandonados es amplio en esta ciudad: la Prisión Provincial, los antiguos Juzgados, las casas de auxiliares del Fuerte de San Francisco, la Cárcel de Mujeres o el Parque Móvil Municipal, además hay numerosos solares y edificios privados que se encuentran sin uso, inmuebles abandonados o tapiados que podrían ponerse en marcha utilizando instrumentos urbanísticos como los Planes de Actuación Edificatoria. La regeneración de estos espacios podría ser uno de los revulsivos que necesita la juventud para decidir quedarse en la ciudad y también una fórmula para revitalizar el centro.
Martínez ha subrayado la importancia de desarrollar políticas de vivienda en el ámbito municipal, “el Ayuntamiento es la administración más próxima y debe atender esta materia, en coordinación con otras administraciones, utilizando instrumentos urbanísticos, buscando la colaboración público-privada y elaborando medidas que faciliten el acceso a la vivienda, en este caso centrado en los jóvenes. Entretener está bien, pero las políticas de juventud tienen que ir más allá, deben abordar cuestiones básicas como el trabajo y la vivienda”.
Esta moción, se suma a otras anteriores propuestas por AIKE como la declaración de zona tensionada, la creación de una Unidad de Gestión Municipal de Suelo, una Empresa Municipal de Vivienda, la hibridación de uso de los locales o incentivar nuevos modelos residenciales como la vivienda colaborativa. Para Riendas “es el momento que el Ayuntamiento apueste por rehabilitación de edificios públicos sin uso y facilite el alquiler para la juventud. Desde la administración local se pueden buscar colaboraciones que beneficien a sus actuales propietarios en el caso de los edificios privados, que den uso a inmuebles de titularidad pública abandonados desde hace años, y que todo ello, sirva para aumentar el parque de viviendas en alquiler en Guadalajara”.