El próximo lunes comenzarás las obras con las que se instalará un hasta ahora inexistente sistema de iluminación ornamental en el puente árabe, dentro de un proyecto coordinado entre el Gobierno de Castilla-La Mancha y la Fundación Iberdrola España.
De manera paralela, el Ayuntamiento de Guadalajara ejecutará nuevos trabajos de limpieza y desbroce en la ribera. Para ambas actuaciones la Confederación Hidrográfica del Tajo ya ha concedido la correspondiente autorización.
El alcalde de la ciudad, Alberto Rojo, era quien daba a conocer el inicio de las obras este jueves, durante la presentación del proyecto de la nueva residencia de Los Olmos, junto al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.
La ejecución del proyecto, que ha supuesto la firma de un convenio entre el Ayuntamiento de Guadalajara, el Gobierno de Castilla-La Mancha y la Fundación Iberdrola España, aparejado a una inversión de 150.000 euros, durará aproximadamente un mes, en función de las circunstancias climatológicas.
Durante este tiempo, la circulación por el puente quedará limitada a la utilización de uno de los dos carriles con los que cuenta la calzada.
La iluminación ornamental pondrá en valor una de las joyas patrimoniales de la ciudad de Guadalajara, declarada como Bien de Interés Cultural (BIC) directamente vinculada a sus orígenes.
El puente sobre el río Henares, fue inicialmente atribuido a Roma, pero tras el estudio del historiador Torres Balbàs se constató que se trataba de una obra árabe del siglo X, realizada dentro de los programas constructivos de Abd Al-Rahman III. Se trata de un viaducto que cruza el río Henares a su paso por Guadalajara y es la construcción más antigua que conserva la ciudad. Es uno de los pocos puentes andalusíes conservados actualmente en España.
Inversión de 15 millones de euros en la nueva residencia de Los Olmos
Alberto Rojo mostraba su “alegría” por la puesta en marchar del “importante” proyecto que supondrá la creación de la nueva sede de la residencia de Los Olmos, en el edificio abandonado del antiguo hospital Ortiz de Zárate, al tiempo que las dependencias actuales en la avenida de Castilla se convierten en un centro de día.
“Este nuevo complejo será toda una referencia y representará además el nuevo modelo de residencia para personas mayores, más parecido a un hogar”, expresaba el alcalde, al tiempo que apuntaba al “cambio por completo” que está viviendo el barrio de Cacharrerías”, aludiendo a proyectos como el nuevo campus, el parque del Coquí, el barranco del Alamín con el auditorio y el Alcázar o incluso con el propio puente árabe.
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, también se refería al momento de “transformación que vive Guadalajara. “Muy difícil encontrar en la historia de la ciudad un momento en el que hay tantas cosas hechas, haciéndose o por hacer, pero ya en camino. Y eso tiene que ver con la perseverancia, incluso a veces tozudez, de Alberto”, aseguraba.
