AIKE ha comparecido ante los medios de comunicación presentando la primera de las mociones que llevarán al próximo Pleno, poniendo de manifiesto el compromiso de esta formación con la gestión de los servicios públicos y el acceso a la cultura. Así lo ha explicado Susana Martínez, portavoz de AIKE en el Ayuntamiento de Guadalajara y Javier López Roberts, presidente del partido.
Desde Aike recuerdan las limitaciones y precariedad de los servicios bibliotecarios municipales, una competencia que marca la Ley de Bases de Régimen Local, la Ley de Bibliotecas de Castilla-La Mancha y que el Ayuntamiento de Guadalajara no acaba de asumir, dedicando escasos recursos e incumpliendo los indicadores mínimos que marca la normativa. La Suárez de Puga, inaugurada en el año 2018, sigue siendo la única biblioteca municipal, ya que el anunciado proyecto para convertir la antigua nave de forja del Fuerte en biblioteca, con el proyecto redactado y la licencia concedida, ha quedado paralizado.
Susana Martínez ha señalado que la Súarez de Puga nació pequeña y, en estos seis años de vida, sigue si cumplir los requisitos mínimos que marca la normativa para el tamaño y la población de Guadalajara. No se ha avanzado en la dotación del fondo, que apenas supera los 7.000 ejemplares, con el agravante de que en el último año no se han realizado nuevas adquisiciones, “VOX en otros municipios se ha dedicado a censurar títulos y materiales, aquí han ido más allá y directamente no han comprado nada, cero adquisiciones”.
Las limitaciones de espacio son también evidentes, ocupando la biblioteca los mismos escasos 400 metros cuadrados con los que se abrió en la segunda planta del CMI Eduardo Guitián. Con un mínimo, y externalizado personal, se atienden las 60 horas de apertura semanales y las actividades que se organizan desde la biblioteca, 280 durante el 2023, más de 58.000 visitas según los datos estadísticos del último año.
En las últimas semanas las usuarias y usuarios han iniciado una recogida de firmas preocupados por la continuidad del servicio a partir del 30 de junio, fecha en la que finaliza el contrato con la empresa que actualmente lleva la gestión. El concejal de cultura, Javier Toquero, no ha explicado como se va a gestionar la biblioteca a partir de esa fecha, ni que pasos está dando el Ayuntamiento para resolver cuestiones que están estancadas desde hace tiempo y que impiden que los vecinos y vecinas de Guadalajara tengan servicios bibliotecarios acordes al tamaño y población de la ciudad en la que viven.
La moción que AIKE trasladará al resto de la corporación en el próximo Pleno pide una mejora en los servicios bibliotecarios, abogando por una gestión directa, que garantizaría la continuidad del servicio, sin cierres entre un contrato y otro. Una propuesta que ya se recogía en el programa electoral con el que el partido municipalista se presentó a las elecciones, “desde AIKE apostamos por la municipalización de este servicio, la externalización es una anomalía más si nos comparamos con el resto de municipios de la región y no siempre, como está ocurriendo en estos momentos, se garantiza la apertura y continuidad” añade Javier López-Roberts. El presidente de la formación ha recordado que la fórmula es posible, el ejemplo es que se acaba de hacer con el servicio de recaudación de multas, que desde hace unos meses se realiza por personal del Ayuntamiento.