El Gobierno de Castilla-La Mancha, a través de la Consejería de Desarrollo Sostenible, ha informado que la región cuenta a día de hoy con 327 ejemplares de lince ibérico gracias a la consolidación de tres núcleos poblacionales de reintroducción en su territorio: los Montes de Toledo; Sierra Morena Oriental; y Sierra Morena Occidental.
Así se desprende del estudio realizado por el grupo de trabajo del lince, que coordina el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico del Gobierno de España, y del que forma parte Castilla-La Mancha, junto a otras regiones como Andalucía y Extremadura, o el vecino país de Portugal, y que además cuenta con la colaboración de diferentes entidades ambientales
El estudio que se ha dado a conocer identifica la población censada de este felino en peligro de extinción con los datos del año 2020 que han aportado las diferentes administraciones que participan en los programas de reintroducción.
Según refleja dicho estudio, el total de ejemplares censados durante 2020 en toda su área de distribución ibérica fue de 1.111, repartidos entre Andalucía (506), Castilla-La Mancha (327), Extremadura (141) y Portugal (140).
Por primera vez desde que existen datos cuantificados de la población de lince ibérico, se ha superado la cifra de 1.000 ejemplares censados, lo que supone un hito muy relevante en el proceso de recuperación de esta especie y de mejora de su estado de conservación.
El consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, ha valorado como “muy positivos” estos datos. “Castilla-La Mancha aporta casi el 30 por ciento de los linces que hay en la Península Ibérica a día de hoy”, ha afirmado, “lo que significa que somos la segunda Comunidad Autónoma en población de este felino respecto a ejemplares en el censo correspondiente a 2020”.
Escudero, también se ha congratulado de la consolidación en la región tres núcleos de población, Montes de Toledo; Sierra Morena Oriental; y Sierra Morena Occidental, “lo que confirma que el arduo trabajo que estamos llevando a cabo en materia de reintroducción y conservación de especies en peligro de extinción desde el Gobierno que preside Emiliano García-Page está dando sus frutos”, ha señalado.
145 ejemplares en los Montes de Toledo, 107 en Sierra Morena Oriental, y 75 en la Occidental
El estudio señala, que del total de los 327 ejemplares de lince ibérico censados durante la temporada de 2020 en Castilla-La Mancha, la zona de reintroducción de Montes de Toledo (Toledo) presenta un censo total de 145 ejemplares en 2020, de los que 76 son adultos. De estos, 21 son hembras reproductoras, y hay 69 cachorros registrados.
La zona de reintroducción de Sierra Morena Oriental (Ciudad Real) acoge 107 ejemplares totales; 66 son adultos, y 12 de estos, hembras reproductoras, con una producción de 41 cachorros durante 2020.
Respecto al núcleo poblacional de Sierra Morena Occidental (Ciudad Real), habitan 75 linces censados, de los cuales 38 son adultos -con 14 hembras reproductoras- y 38 cachorros nacidos.
Castilla-La Mancha cuenta con la media más alta de cachorros por hembra reproductora
Finalmente, como dato significativo, se destaca que las hembras reproductoras de los tres núcleos poblacionales castellanomanchegos son las que más cachorros por ejemplar aportan al censo, con 3,1 cachorros por cada madre.
En el resto de comunidades, las ratios han sido los siguientes: Andalucía, 1,3 cachorro nacido por hembra territorial; Extremadura,1,2 cachorros por hembra territorial respectivamente, y en Portugal, la proporción es de 2,3 cachorros por hembra.
El consejero ha recordado que, pese a estos buenos resultados y la favorable evolución de los proyectos en los que participa Castilla-La Mancha, los trabajos de reintroducción de la especie en los que participa “la Administración que represento no se detienen aquí y desde finales de 2020 hemos iniciado una nueva etapa formando parte del proyecto europeo Life ‘Lynx Connect’, aprobado por la Comisión Europea, con un montante de 18,7 millones de euros, y mediante el cual, “queremos seguir dando pasos para la recuperación del lince ibérico enfocados a su gestión genética y demográfica, y una vez que estamos logrando consolidar las poblaciones en las áreas de reintroducción, posibilitar la conexión efectiva entre poblaciones disminuyendo sus amenazas”, ha dicho Escudero.
Castilla-La Mancha ha liberado durante la primavera de este 2021 un total de diez linces que habían sido criados en cautividad. En total, desde el año 2014, han sido más de 100 los ejemplares de esta especie los que se han devuelto al medio natural en la región.