El sector cinegético de Castilla-La Mancha celebra el éxito de la recogida de apoyos impulsada por empresarios de la provincia de Toledo tras reunir más de 3.500 firmas, de las que más de 700 corresponden a empresarios, comerciantes y hosteleros, con el objetivo de reclamar al Ejecutivo regional la reactivación urgente de la temporada de caza actual, así como su práctica total en la Comunidad en pos de la economía rural, ya que hasta el momento se encuentra reducida a su práctica dentro del término municipal del cazador a causa de las restricciones por la Covid-19.
Así lo han reclamado esta mañana, a través de una comparecencia y en representación de los más de 700 empresarios firmantes, los gerentes de Cacerías Ibéricas, Darío Vallano; Los Conejos Hostelería S.L., José Luis Conejo; Artesanos del cuero Rey Pavón, Mayte Nieto; Granja Zapirroja S.L., José Luis Zapata; y Distribuciones Frigoríficas S.L., Alejandro Paniagua, quienes desde el sector empresarial y cinegético han agradecido el apoyo de los miles de firmantes que, conscientes de las graves consecuencias de la paralización de la caza, solicitan el alivio de las restricciones impuestas.
Con vista en esto, si bien durante el encuentro se ha recalcado la comprensión de los empresarios ante el endurecimiento de las restricciones y la gravedad de la pandemia, el representante de Cacerías Ibéricas, Darío Vallano, ha puesto de manifiesto el gran impacto económico, medioambiental y social que acompaña a la limitación de la actividad cinegética en la región, a la que ha destacado como una de las más afectadas por la España vaciada.
En este punto, Vallano ha incidido en la caza como una actividad que genera 23.000 puestos de trabajo y 640 millones de euros de forma anual solo en Castilla-La Mancha, según un informe de la Fundación Artemisan, por lo que ha incidido en su papel como un importante revulsivo para el desarrollo de muchos municipios, además de recordar el duro golpe que ha supuesto para muchas empresas los daños generados por el temporal Filomena.
Una línea que, por su parte, han defendido tanto Nieto, quien ha reiterado que la caza es una importante fuente de ingresos “si siguen paralizados podrían ser un desastre para nuestra economía”, como Conejo, que ha recalcado los daños de la pandemia sobre la hostelería y la escasez de ayudas recibidas por parte de las administraciones, al tiempo que ha mostrado su preocupación por un posible agravamiento de la situación por el bloqueo de la temporada cinegética, especialmente durante el invierno.
Asimismo, los representantes han defendido la caza como una práctica segura en la que se ha restringido todo el ocio que la acompaña y han insistido en el compromiso del sector por endurecer los protocolos desde el pasado mes de marzo, todo con el fin de garantizar al máximo la seguridad durante su ejercicio. En este punto, Vallano ha remarcado que “no hay motivo para paralizar una actividad con nulo riesgo de contagio” y ha recordado que comunidades autónomas como Andalucía, Extremadura o Castilla y León permitirán, desde hoy, la movilidad por la caza, “por lo que en Castilla-La Mancha nos sentimos ciudadanos de segunda”.
Por otro lado, el gerente de Cacerías Ibéricas también ha remarcado que el bloqueo de la actividad cinegética ha afectado especialmente a las modalidades de aves cinegéticas, en especial al ojeo, del que dependen entre el 75 % y el 90 % de los empleos relacionados con la caza en la región, según el informe de la Fundación Artemisan, así como ha asegurado que vendrá acompañado de otras consecuencias relacionadas con la sobrepoblación de especies, como la proliferación de enfermedades zoonóticas o el aumento de accidentes de tráfico.
Por tanto, desde el sector han trasladado a la Consejería de Agricultura su petición de ampliar la temporada cinegética para determinadas especies y de reactivar de forma urgente la actual, siempre sin afectar a periodos migratorios y de reproducción, a los aspectos biológicos de las diferentes especies y, como no puede ser de otra manera, cumpliendo con todas las directivas.