Con motivo de la celebración del Día de la Tierra, este 22 de abril, PEFC España, en el marco de la campaña “Cuidamos los bosques”, lanza un año más el concurso de fotografía #Cuidamoslosboques foto en el que los bosques, los trabajadores forestales y las personas de la cadena de valor de la madera serán protagonistas. Como novedad, este año tiene cabida una categoría especial sobre trabajos forestales para visibilizar el trabajo de las personas que hacen posible mantener los bosques de forma sostenible.
Comienza así nueva edición del concurso cuyo objetivo es poner el foco de atención en la importancia de los bosques y en cómo una bioeconomía basada en sus productos puede ayudar a mitigar el cambio climático.
Los bosques cubren alrededor del 30% de la superficie terrestre de la tierra y tienen un papel fundamental en el desarrollo sostenible del planeta, pues aportan, tanto beneficios ambientales, como socioeconómicos. Su contribución en la mitigación del cambio climático es clara: proporcionan el oxígeno que respiramos y secuestran el CO2 de la atmósfera, almacenándolo durante todo su ciclo de vida. De hecho, los bosques certificados PEFC del mundo pueden absorber 315 millones de toneladas de CO2 al año.
Además, regulan la temperatura, favorecen el ciclo del agua, albergan la mayor parte de la biodiversidad terrestre (un 80%) y son fuente de alimento y medicinas. Por otro lado, los bosques son el medio de vida de muchas personas, desde las que recolectan alimentos, semillas, plantas aromáticas y medicinales, hasta las que se encargan de la extracción de resinas, caucho o corcho y de otros aprovechamientos de la madera para mobiliario, decoración, leña, pasta, papel o cartón, por lo que su función como fuente de ingresos y empleo verde es muy relevante en el camino a la bioeconomía. En este sentido, el sector forestal genera puestos de trabajo para al menos 33 millones de personas en el mundo, y miles de millones de personas utilizan los productos forestales. Se calcula que más de la mitad de la producción económica mundial necesita de los servicios de los ecosistemas, y eso incluye a los servicios que proporcionan los bosques. Pero para que los bosques sigan aportando todos estos beneficios, es necesario que se gestionen de forma sostenible y se aproveche su madera y recursos responsablemente.
El sello PEFC, durante sus más de 20 años de trayectoria, ha venido dando respuesta a la necesidad de preservación de los bosques mediante medidas y normas que impulsan la Gestión Forestal Sostenible y la trazabilidad del origen sostenible de los productos con la Cadena de Custodia, asegurando la protección de los bosques, fortaleciendo la gestión de los recursos naturales y aumentando la productividad de la tierra, la supervivencia de las especies, la renovación forestal y el crecimiento y mantenimiento de la fauna y la flora en los territorios, contribuyendo, con todo ello al desarrollo rural y sostenible.
Premios: colaboración sostenible de productos forestales
Tres colaboradores harán posible que las personas ganadoras del concurso puedan optar a tres Premios Nacionales, así como al certamen internacional en el que se decidirá el mejor fotógrafo PEFC entre varios países.
Los colaboradores tienen un gran compromiso con la sostenibilidad forestal y son conscientes de la importancia de que los productos del bosque cuenten con la etiqueta PEFC para informar al consumidorer de que sus prácticas y materias primas proceden de fuentes responsables. Agradecemos a Fuente La Virgen, Abadía Retuerta y Miel Muria por apoyar este concurso e implicarse en la promoción de los entornos naturales como medio de vida.
Fuente La Virgen es una dehesa del territorio sevillano gestionado de manera sostenible que cuenta con encinas, alcornoques y quejidos que sirven de cobijo y alimento para la cría de cerdo ibérico de exquisita calidad.
Abadía Retuerta se encuentra en una superficie de viñedos vallisoletana rodeada por territorio forestal con la certificación PEFC en Gestión Forestal Sostenible. Además de producir vino, piñones, madera, setas y plantas aromáticas, desarrolla proyectos de control biológico de plagas, iniciativas para la prevención natural contra incendios y dentro de la finca existen dos áreas protegidas y calificadas como Lugar de Interés enmarcadas en Red Natura 2000.
Miel Muria ha sido pionera en ser la primera miel europea procedente de bosques que se gestionan de forma sostenible. La empresa apícola se encuentra en los montes tarraconenses de El Perelló y lleva desde 1810 cuidando de las abejas, promoviendo la polinización y manteniendo la biodiversidad para favorecer la conservación del medioambiente.