El Ayuntamiento de Guadalajara ha recepcionado esta semana finalmente las obras de rehabilitación de la lámina fluvial del barranco del Alamín que han supuesto una inversión de 850.000 euros, y que comenzaron a ejecutarse en agosto de 2024 y que han sufrido el efecto de las continuas inclemencias meteorológicas, obligando a una modificación del contrato y hasta tres ampliaciones en los plazos de ejecución.
De este modo las obras adjudicadas a la empresa GOSADEX S. L por un importe, de 736.178,51 euros, tienen un incremento de 116.132,79 euros, con el modificado del proyecto aprobado en marzo de 2025, para poder atender nuevos daños en distintos vasos no contemplados en proyecto inicial, ocasionados por las lluvias torrenciales de septiembre de 2024, que también inundaron los vasos demolidos y excavados con anterioridad, que tuvieron que ser desaguados mediante bombas por la empresa contratista.
“Esto, unido a las lluvias prácticamente generalizadas desde el mes de marzo, que han impedido jornadas de trabajo y ha obligado a desaguar en repetidas ocasiones el canal, ha prolongado las obras tres meses sobre lo inicialmente previsto, con tres aplazamientos concedidos a la empresa a causa de la meteorología adversa,” explica el concejal de Infraestructuras, Santiago López.
“Ha sido una actuación complicada porque partíamos de una situación muy dañada de la mayoría de los 40 vasos y 39 azudes que tiene la lámina, debido a las tormentas de antes de la contratación, agravada las lluvias que se han venido produciendo después, en la que no hemos dejado de trabajar hasta dejar la lámina fluvial del Barranco del Alamín restaurada al completo”, explicaba López Pomeda.
Todos los vasos dañados han sido restituidos y se han impermeabilizado con PVC todas las juntas a base de caucho y de cordones hidroexpansivos, además se han reforzado todos los azudes, actuando también en el cerramiento del acceso al cauce en el arroyo de la Olmeda del Conde y al final del tramo urbano del arroyo del Sotillo, donde también está dañada una reja.
“Ahora tenemos la lámina del Barranco del Alamín en condiciones de seguridad lista para el disfrute de los ciudadanos de este paraje urbano tan visitado para el paseo, el deporte y el recreo de las familias y vamos a planear también su correcto mantenimiento para los próximos años, para que, si surgen causas de fuerza mayor, los daños no sean tan extremos”, concluía el concejal.